Templarios en España. Militia Templi en el Camino de Santiago. Día 6 de Agosto 2024.
Redecilla del camino, crónica del 06/08/2024 .
Día muy tranquilo en el camino. Las nubes han predominado a lo largo de toda la mañana, lo que a permitido una temperatura muy agradable.
Como ya viene siendo habitual, se acercan grupos de peregrinos muy a primera hora entre las 07:00 y las 10:00 de la mañana y parón, y sobre las 12:30 vuelve a llegar un goteo continuo de los más rezagados. Pero como ya dijimos, son los que llegan empapándose del camino. Sin prisas, sin retos, viviendo el camino.
Es frecuente que a veces preguntemos a los peregrinos, por la motivación que los ha animado a hacer el camino. Como podemos imaginar, hay casi tantas razones como peregrinos, pero hoy queremos reseñar la que nos cuenta un peregrino en concreto.
Nos llamó la atención que nos diera a sellar dos pasaportes, cuando ya le habíamos preguntado si hacía el camino solo, pregunta recurrente que hacemos para romper el hielo e iniciar una conversación, nos responde que si, pero no del todo. Que lo hace con su amigo que falleció recientemente, de ahí que lleve dos pasaportes el suyo y el del amigo.
Nos decía que desde hacía tiempo, tenían pensado hacer el camino juntos , pero que unas veces por una razón y otras por otro motivo, siempre lo retrasaban. Siempre se decían, este año lo hacemos. Hasta que fue demasiado tarde.
Es vivir la vida en las esperas, siempre esperando que llegue el momento adecuado para hacer aquello que deseamos y que posponemos para cuando llegue el momento justo, que ahora sí, nos permita vivir nuestro sueño.
Y el momento idóneo es ahora, siempre habrá algo que justifique el retraso para otro momento. Este peregrino lo ha descubierto de la forma más amarga, toda la vida esperando a hacer el camino con su amigo y ahora lo tiene que hacer con su amigo en el corazón.
Es una bonita forma de hacer e camino y sin duda un homenaje a la amistad y a su amigo. Pero seguro que los dos hubieran disfrutado más de haberlo hecho unos años antes, cuando de seguro hubiesen podido hacerlo, si no hubiesen estado viviendo una vida en “la espera”.
Paz y bien, hermanos