Templarios en España. Militia Templi en el Camino de Santiago 08 de agosto de 2024.


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Redecilla del camino, crónica del 08/08/2024

Mañana de nubes y una ligera llovizna, que se prolonga hasta bien entrado el día.

Un continuo pasar de peregrinos, en grupos, en familias y solos. Muchos españoles, algunos italianos, franceses, ingleses y japoneses.

Y como no, vecinos del pueblo. Hoy nos han visitado dos vecinos, que aunque casi desde su juventud se marcharon del pueblo, todos los veranos vuelven por aquí.


Nos contaban mil anécdotas del pueblo de cuando eran niños y sobre todo sobre la iglesia. De  como recuerdan la última reforma que se hizo allá por los años 60.

Al parecer el coro que actualmente está al nivel de la nave de la Iglesia, en su origen estaba a la misma altura que hoy se encuentra el órgano. Se accedía a él por la que hoy es la escalera de la torre del campanario.

Lo recuerdan con cariño y nostalgia, ya que ellos, aún siendo niños participaron de aquellas tareas de reformas.  Nos decían que salían corriendo de la escuela para ir a la iglesia y echar una mano en lo que se les dijera.

Recuerdan como se trasladó la pila bautismal a su ubicación  actual desde el lugar donde hoy está el coro. Que la Virgen de Ayago, hoy en un lado del altar, en su tiempo estuvo en el centro del retablo mayor, justo donde hoy está el sagrario. Y que en aquella misma reforma, (1963) y adelantándose al Concilio Vaticano II, se retiró el altar del retablo, como luego aconsejó el Concilio en 1965.

El nuevo altar de unas dimensiones considerables, fue necesario la colaboración de más de quince hombres del pueblo para su instalación, según nos contaba uno de nuestros cronistas, que colaboró como albañil.

En aquellos años, nos cuentan, era muy riguroso el orden en el que debían  sentarse en los bancos de la Iglesia para la misa. Las mujeres del lado de la Virgen del Sagrado Corazón y los hombres del lado opuesto, el del Sagrado Corazón de Jesús, imágenes que aún se conservan en su misma ubicación. Los mozos, no casados,  no utilizaban los bancos, sino que se situaban en el coro. Esto lo hemos visto nosotros en la misa de los domingos. Aunque imaginamos que hoy ya no será por ser mozos, más bien por costumbre.

Una mañana muy entretenida y didáctica, lo que agradecemos enormemente.  El ser partícipes de las historias de este pueblo, al que cada vez nos sentimos más unidos, como no puede ser de otra manera al ser siempre tan bien acogidos. Mil gracias a Redecilla del Camino por su cariño.

Paz y bien, hermanos

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